La investigación del CTI probó que el médico y su exasesora jurídica firmaron un contrato del servicio farmacéutico con una Unión Temporal, que no cumplía los requisitos de ley. También fue sentenciada junto con un contratista.
La investigación del CTI probó que el médico y su exasesora jurídica firmaron un contrato del servicio farmacéutico con una Unión Temporal, que no cumplía los requisitos de ley. También fue sentenciada junto con un contratista.