A nivel mundial, el temor al contagio por el COVID-19 ha llevado a las personas a tomar la decisión de aplazar o cancelar sus consultas, diagnósticos y tratamientos médicos. Según la Organización Panamericana para la Salud (OPS) las atenciones médicas en ciertas especialidades médicas disminuyeron un 70% desde el principio de la pandemia[i], por la pérdida de confianza y seguridad de los pacientes y sus cuidadores en los centros de salud.
El año pasado en Colombia las consultas bajaron a un promedio de 18 millones, 7 millones menos comparado con el 2018 y 2019, cuando se realizaron aproximadamente 25 millones por año[ii]. Frente a esta situación la campaña “Volver es vivir” busca concientizar a las personas con enfermedades No-COVID-19 en la importancia de atender sus condiciones y enfermedades en los centros de salud del país.
Además, las interrupciones en los servicios de salud de rutina pueden convertirse en un riesgo para los pacientes que viven con alguna enfermedad crónica no transmisible como las cerebrovasculares, las cardiovasculares, las respiratorias y el cáncer, que por su intervención tardía pueden resultar más costosas para el sistema de salud y de mayor impacto para el paciente[iii].
En el caso de los accidentes cerebrovasculares se debe recordar que constituyen la segunda causa de muerte en Colombia y una de las principales fuentes de incapacidad, por lo que su atención en los centros de salud no da espera. La Asociación Colombiana de Neurología estima que cada año 45.000 personas sufren un ACV en el país, en donde solo entre enero y julio del año pasado, 8.693 personas fallecieron por este tipo de enfermedades, según cifras reveladas por el Dane[iv].
Así mismo, el Sistema Integrado de Información (SISPRO) aseguró que el país disminuyó en un 25% los procedimientos de ACV en el 2020 en comparación con 2019, debido a la pandemia.
El Dr. Marco Fonseca, presidente de la Asociación Colombiana de Neurocirugía y Presidente del Grupo Colombiano de Neurointervencionismo explicó que “los accidentes cerebrovasculares de tipo isquémico, aquellos ocasionados cuando un coágulo obstruye un vaso sanguíneo cerebral, han aumentado su incidencia de forma significativa. Recordemos que como secuela del Covid-19 no solo puede quedar el daño pulmonar, sino también, el daño cerebral”.
Es importante que los pacientes retomen la constancia en el manejo y seguimiento de sus enfermedades, como lo venían haciendo antes de la pandemia. “Estamos empezando a ver muchos efectos secundarios debido a que las personas no están haciendo los tratamientos adecuados de sus enfermedades generales, y esto nos lleva a ver más hemorragias intracerebrales y rupturas de aneurismas cerebrales, porque la gente no está yendo a sus controles”, comentó el Dr. Fonseca.
Si una persona presenta alguno de los siguientes síntomas: parálisis de la mitad de la cara; dificultad para hablar; debilidad para levantar uno de los brazos; dolor de cabeza intenso; mareos repentinos; confusión; y problemas para ver en uno o ambos ojos, es necesario que reciba tratamiento especializado lo más pronto posible, entre un lapso de tiempo menor a 4 horas después de iniciados los síntomas, de esta forma, se podrá empezar a suministrar medicamento y se evitará consecuencias perjudiciales para el paciente.
“Volver es vivir” entiende la importancia de proporcionar información a los colombianos para que conozcan todas las medidas que se están implementando, con el fin de ofrecer un servicio libre de riesgos y donde se pueda retomar los diferentes procedimientos que se venían brindando antes de la emergencia sanitaria.
Cabe resaltar que los centros de atención hospitalaria en el país han habilitado áreas seguras con protocolos de atención con los más altos estándares de bioseguridad. De esta forma, los pacientes podrán volver de manera confiable y responsable, ya que el cuidado de su salud es un asunto de amor propio.
“El sitio donde más seguro pueden estar los pacientes en este momento, es en centro de salud. Nosotros los médicos somos altamente responsables con nuestro cuidado, y todos los protocolos de bioseguridad son llevados a fondo en los sitios y espacios donde se atienden a los pacientes, es por el contrario en la calle y en sus propias casas donde la gente tiende a contagiarse”, concluyó Fonseca.
[i] OPS: Organización Panamericana para la Salud: La COVID-19 afectó el funcionamiento de los servicios de salud para enfermedades no transmisibles en las Américas https://www.paho.org/es/noticias/17-6-2020-covid-19-afecto-funcionamiento-servicios-salud-para-enfermedades-no
[ii] Revista Semana: ¿Dónde están los pacientes? https://especiales.semana.com/coronavirus-colombia-hoy-donde-estan-los-pacientes/index.html
[iii] Scielo: Costos de la enfermedad crónica no transmisible: la realidad colombiana: http://www.scielo.org.co/pdf/recis/v14n1/v14n1a10.pdf
[iv] Fundación Cardiovascular de Colombia: Hospital Internacional de Colombia (HIC), líder en el manejo de pacientes con ACV. https://www.fcv.org/co/prensa/noticias/hospital-internacional-de-colombia-hic-lider-en-el-manejo-de-pacientes-con-acv