El uso excesivo de pantallas podría robar hasta 2.500 horas de interacción familiar en los primeros 12 años, afectando el desarrollo cognitivo y emocional de los niños, advierte la psiquiatra Laura Villamil.

El uso excesivo de pantallas podría robar hasta 2.500 horas de interacción familiar en los primeros 12 años, afectando el desarrollo cognitivo y emocional de los niños, advierte la psiquiatra Laura Villamil.