Un proyecto de inclusión financiera rural, liderado por Imix y su CEO Sandra Rubio DaCosta, emprendedora colombiana, recibió el premio de Innovatech Latam por sus logros en la habilitación de una fábrica de crédito rural inspirada en la corresponsalía bancaria, con la cual se llega con microcrédito digital a encadenamientos productivos en zonas rurales.
A través de la innovación tecnológica de última milla que usa modelos inspirados en corresponsalía para la inclusión financiera, Imix, una fintech de origen colombiano, que opera en Colombia, Ecuador, Guatemala y México, logró hacer 60% más baratos los costos de originación, desembolso y recaudo para cooperativas, acercándolos así a pequeños productores rurales que requieren apoyo financiero. Además, disminuyó 5 veces el tiempo de otorgamiento de créditos, lo cual es clave en comunidades artesanales y agropecuarias.
Sobre el proyecto galardonado, la innovación de Imix facilitó a pequeños productores en la ruralidad de Guatemala, que cuentan con difíciles condiciones socioeconómicas, acceso a microcréditos productivos al unir a agentes financieros como cooperativas y bancos, con personas que son eslabones centrales de la economía popular de la zona y sus agentes productivos.
Los ecosistemas integrados en el piloto incluyen casos como las mujeres tejedoras de la zona de Cobán, famosas por sus obras artesanales, con vendedores de hilos, al igual que agricultores de la zona de Chiquimula, con sus proveedores de agro insumos.
De estas mujeres, ni siquiera la mitad de ellas nunca había tenido acceso adecuado a servicios financieros, ya sea desde la banca o cooperativas, debido a su informalidad y su ubicación en la ruralidad dispersa.
Ante este panorama, la implementación de una solución financiera basada en tecnología digital, llevada a cabo por Imix, impactó la integración de última milla entre los agentes tradicionales de crédito y las comunidades rurales excluidas. Los resultados muestran que las mujeres tejedoras tuvieron un 34% de incremento en sus ingresos al tener acceso a mayor capital de trabajo, asegurando insumos de producción, adecuados, pertinentes y de buena calidad en poco tiempo.
En este caso, Imix digitalizó y automatizó el método financiero más popular en Latinoamérica: fiar. A través de su servicio ‘Acá se fía’ mejoró el acceso al capital para así incrementar la productividad de las mujeres de la comunidad usando una estrategia de ‘fábricas rurales de crédito’ inspiradas en la corresponsalía bancaria.
En adición a esto, sumaron al ecosistema las cooperativas financieras Coopsama y Cooitza, como fondeadoras de los créditos, y los puntos de venta de los lugares en la ruralidad donde se compran los insumos, encargados de caracterizar a los beneficiarios de los créditos, logrando una plataforma de economía colaborativa.
“Este reconocimiento es energía para el motor de Imix. El respaldo del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola FIDA y la Fundación Alemana Sparkassen, y los logros en términos de impacto nos confirman nuestra gran visión de impactar positivamente el acceso al crédito rural a nivel Latinoamérica”, comentó Sandra Rubio DaCosta, CEO de Imix.
Paralelos en Colombia
En Colombia la inclusión financiera es un objetivo intersectorial, entre el Estado, los bancos y las FinTech, que ha avanzado con fuerza en los últimos cinco años. Según datos del último informe de la Banca de las Oportunidades, el acceso al crédito formal en la ruralidad es de solo el 9,9%, mientras en las ciudades 39.4%.
Al respecto, ya varios expertos en finanzas han puesto la lupa no sobre la inclusión tan solo, sino sobre el uso efectivo de productos financieros, que se posiciona 15 puntos porcentuales por debajo de los datos de inclusión, según el Banco de la República. “Como FinTech trabajamos en ese objetivo: innovar con estrategias que incluyan lo digital con un enfoque humano”, afirmó Rubio DaCosta
Le puede interesar: Davivienda recibe premio como “Lugar Excepcional para Trabajar” otorgado por Gallup
Imix, es una FinTech que hace parte del portafolio de Yunus Social Business (YSB), un fondo global que cree en el poder de las Empresas Sociales y la Innovación Social Corporativa para cerrar las brechas sociales y ambientales de la humanidad, impulsado por el reconocido premio Nobel de economía Muhammad Yunus, y bajo esta alianza trabaja desde hace casi 5 años en proyectos de inclusión financiera en zonas rurales en Colombia con pequeños productores agrícolas, cooperativas y bancos.
“En Imix seguimos trabajando desarrollando plataformas Fintech que faciliten llegar a la última milla. Estamos comprometidos con masificar el acceso a estas innovaciones también en Colombia, donde la financiación productiva de la economía popular es una necesidad”, concluyó Rubio DaCosta.
Lea también: Productores rurales dispondrán de $150.000 millones mediante 9 líneas especiales de crédito