La crisis sanitaria que originó el coronavirus hizo que se volvieran obligatorios hábitos de cuidado personal como el uso permanente del tapabocas, el lavado constante de manos, el uso de gel antibacterial y el distanciamiento.
Aunque alguno de ellos pueda llegar a ser incómodo, a la larga, estos nuevos hábitos trajeron también aspectos positivos. Sobre la nueva conciencia y las enseñanzas que ha dejado el COVID-19 se refirió la doctora Sandra Viviana Muñoz Rodríguez, epidemióloga de Coomeva Medicina Prepagada, quien resaltó el aumento del servicio de teleconsultas, los cuidados en casa y el uso más racional de los servicios de salud.
Autocuidado
Según la experta, el COVID-19 generó una conciencia colectiva que trajo a la cotidianidad medidas básicas como el lavado constante de manos, cubrirse al estornudar y el aislamiento al presentar síntomas de gripe. “Tener esos cuidados para no contagiar a otros son medidas que la pandemia nos ha reforzado. Aun cuando últimamente las medidas ya se están flexibilizando, las personas tienen una predisposición a mantenerlas, ya no por cuenta del COVID-19 sino para otras enfermedades que también podemos transmitir”.
La epidemióloga destaca que la medicina sabe hace mucho que el lavado de manos salva vidas. En este sentido, “el COVID-19 solo ha vuelto a recordar la importancia de algo que ya se sabía, pero nos ha enseñado, por ejemplo, que es mejor estornudar cubriéndose con el codo en lugar de con la mano y que permanecer unos días en casa en prevención de contagiar a otras personas es una buena idea”.
Por otro lado, la doctora Muñoz comenta que el coronavirus ha motivado a la gente a ser más sana y que la salud física es una de las principales preocupaciones de la ciudadanía desde que se decretó la pandemia.
Avance tecnológico en medicina
La epidemióloga hizo énfasis en la apuesta tecnológica en plataformas y procesos que logren un equilibrio entre la atención presencial y la digital. En el caso de Coomeva Medicina Prepagada, las consultas por canales digitales experimentaron un gran aumento respecto de las cifras antes de pandemia. WhatsApp Business fue una herramienta primordial que permitió atender 105.000 solicitudes solo en el primer semestre de 2021. También hubo 9.100 consultas a través del centro médico virtual Dr. Félix y 308.000 llamadas atendidas en el contact center.
Para la doctora Muñoz, estas cifras suponen un impacto muy positivo en el sistema de salud en general al agilizar la atención médica y disminuir el número de pacientes en las salas de espera y en urgencias.
Mejor uso del servicio de urgencias
Coomeva Medicina Prepagada indicó que a inicios del 2021 la asistencia de pacientes a urgencias se redujo aproximadamente en un 50%, permitiendo priorizar la atención y actuación en función del nivel de gravedad de los pacientes. Desde mayo de 2020 a diciembre de 2021, también el promedio de ocupación de urgencias en Bogotá se ha mantenido en un promedio del 80% frente a un 95 % que era el promedio antes de marzo de 2020.
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Sandra Viviana Muñoz Rodríguez aclaró que no se trata de evitar acudir a urgencias a toda costa. Durante la pandemia, se incrementó la ansiedad en las personas y, mientras unas buscaban atención rápida ante cualquier síntoma, otros pacientes dejaban pasar señales graves por temor a infectarse en los centros médicos. La experta puntualizó que hay que estar atentos a algunos síntomas preocupantes como fiebre alta persistente, dificultad para respirar, dolor de pecho o pérdida de consciencia, especialmente si las personas que los sufren son mujeres en embarazo, adultos mayores o personas con comorbilidades o afecciones crónicas.