El presidente de Colombia, Iván Duque, rechazó este miércoles la recomendación que más temprano hizo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de que se deben tolerar los cierres de vías como parte de las protestas sociales.
“Hay que ser claros: Nadie puede recomendarle a un país ser tolerante con actos de criminalidad”, dijo Duque en declaraciones a la prensa difundidas por su despacho.
Más temprano, la presidenta de la CIDH, Antonia Urrejola, en rueda de prensa virtual desde Washington, presentó 41 recomendaciones al Estado colombiano en un informe titulado “Observaciones y recomendaciones visita de trabajo a Colombia”.
Dicho informe se realizó con base en la visita que una delegación del organismo hizo al país del 7 al 10 de junio pasados ante denuncias de violaciones de los derechos humanos por parte de la Fuerza Pública, en el marco de las protestas sociales lideradas desde el 28 de abril y hasta el 15 de junio por centrales obreras contra el Gobierno.
Según las recomendaciones de la CIDH, “es preciso tolerar que las manifestaciones generen cierto nivel de perturbación de la vida cotidiana, por ejemplo, con relación al tráfico y las actividades comerciales, a fin de no privar de su esencia al derecho de reunión pacífica”.
Asimismo, sugirió que cuando “la eventual perturbación a la vida cotidiana en el seno de las protestas se extiende en el tiempo y escala a punto de comprometer gravemente la garantía de otros derechos”, el Estado debe “facilitar todos los mecanismos de diálogo posibles y la coexistencia de todos los derechos en tensión, teniendo el uso de la fuerza como último recurso”.
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Al respecto, Duque aseguró que los bloqueos en el país han atentado contra los derechos colectivos y que por eso son “enfrentados con la Constitución y la ley”, al igual que los actos de vandalismo y de terrorismo urbano de baja intensidad.
“Vimos niños morir en ambulancias, vimos ciudades desabastecidas, vimos personas perder el empleo y limitarse en su movilidad por cuenta de esos bloqueos, y esos bloqueos están claramente condenados en nuestro código penal y nosotros seguiremos defendiendo el código penal colombiano para la protección de los derechos de todos los ciudadanos”, agregó Duque.
Los bloqueos de vías por parte de manifestantes, que se mantuvieron por cerca de dos meses en varias carreteras del país, generaron desabastecimiento de alimentos, medicinas y combustibles en algunas de las principales ciudades, especialmente en Cali, por lo que el Gobierno retiró los cierres de vías de manera paulatina mediante la acción de la Policía y del Ejército.
Entre el 28 de abril y el 15 de junio en Colombia se desarrollaron jornadas en el marco del Paro Nacional en las cuales se presentaron disturbios, actos de vandalismo y enfrentamientos entre civiles y policías que derivaron en denuncias de violaciones de derechos humanos, lo que motivó la visita de una delegación de la CIDH, por lo que el organismo presentó este miércoles sus recomendaciones frente a lo observado.
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Con información de Sputnik.