El Día Internacional de la Mujer se conmemora este año frente a nuevos retos por la certeza de gravedad de la crisis social provocada por la pandemia. En el marco de esta conmemoración, la directora de Prosperidad Social, Susana Correa Borrero, reiteró el compromiso que la entidad tiene, como cabeza del Sector de la Inclusión Social, en mitigar el impacto de la pandemia y recuperar el ritmo de reducción de la pobreza asumiendo el trabajo diferencial que exige la superación de la desigualdad que sufren las mujeres.
“Todo el Gobierno ha fortalecido su convicción de priorizar a las mujeres en los programas. De hecho, el gran esfuerzo que se desplegó el año pasado para mitigar los impactos sociales de la pandemia tiene en gran medida como sujetos de atención a mujeres”, dijo Correa. La entidad acompañó durante 2020 a más de 6,5 millones de mujeres con los programas de transferencias monetarias y los de inclusión productiva: son cerca del 70 por ciento del total de titulares y participantes.
Más allá del volumen, los programas están ajustando su ejercicio para responder con mayor eficiencia e intensidad a los problemas complejos que enfrentan las mujeres. Este año, los dos programas de transferencias monetarias condicionadas -Familias en Acción y Jóvenes en Acción- desarrollarán una estrategia de promoción y conocimiento de derechos, socialización de rutas de acceso a la justicia y prevención de violencias basadas en género.
La estrategia es posible por una alianza hecha el año pasado con el Ministerio de Justicia y del Derecho y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Prosperidad Social lo implementará en Familias en Acción y Jóvenes en Acción por considerar que sus componentes de Bienestar Comunitario y los de formación, son escenarios adecuados para la estrategia y porque refuerza resultados que distintos estudios de impacto han evidenciado.
“Las mediciones de impacto de Familias en Acción muestran que hay mayores probabilidades de ocupación de las mujeres titulares de los hogares beneficiarios, de participación en organizaciones comunitarias, y que están mejor informadas y empoderadas para enfrentar problemáticas como la violencia intrafamiliar”, expresó Correa.
La estrategia cubrirá 190 municipios con 25 de las regionales de la entidad. Un equipo de la Dirección de Transferencias Condicionadas de Prosperidad Social -incluyendo 10 enlaces municipales de Familias en Acción- recibió del PNUD la transferencia metodológica en febrero. A partir de este mes comenzará a replicarse para llegar a participantes en los municipios proyectados. Dispone de herramientas como: línea técnica e instrumento de evaluación y valoración, planeadores para facilitar talleres pedagógicos, materiales para apoyar intervenciones temáticas e infografías y audios con fines didácticos, para la difusión en medios de comunicación.
En 2020, en medio de la compleja situación económica provocada por la pandemia, Familias en Acción acompañó a 2.633.598 hogares. De estos el 87,94 por ciento tenía a una mujer como titular del programa. “Del liderazgo que las mujeres tienen en un programa de esta dimensión se ha desprendido buena parte de su éxito. El año pasado transferimos más de 3,3 billones de pesos para el programa”, recordó Correa. Jóvenes en Acción acompañó a 232.568 mujeres, que representan el 54,67 por ciento de los participantes.
Los programas de transferencias no condicionadas también tienen mayoría de mujeres titulares o participantes. Ingreso Solidario fue creado para apoyar a hogares pobres que no estaban vinculados a otros programas sociales. Al cerrar 2020, de 3.084.987 hogares participantes el 64.13% tenía a una mujer como titular. Las mujeres son además el 85,1 por ciento de los titulares de hogares que recibieron la Compensación del IVA y el 56,79 por ciento de participantes de Colombia Mayor.