El gobierno de Colombia, en cabeza del presidente Gustavo Petro Urrego, expidió este domingo un decreto con el que suspende el cese al fuego con el Estado Mayor Central de las Farc (antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y ordena la reanudación de operaciones militares ofensivas.
“La reanudación de las operaciones militares ofensivas y operativos policiales a partir de las 00.00 del día 20 de marzo de 2024 en contra de las estructuras del Estado Mayor Central de las FARC-EP presentes en los Departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca”, se lee en el decreto 0385 del 17 de marzo de 2024 firmado por el presidente Gustavo Petro.
El Ejecutivo señala que la determinación se tomó ante el incumplimiento del Estado Mayor Central de las Farc del cese al fuego en Nariño, Cauca y Valle del Cauca, por el ataque a la población civil, a organizaciones y líderes sociales.
“El EMC del Cauca en sus diferentes frentes no dio desde el principio ninguna señal de querer un proceso serio de paz. Creyó, muy equivocadamente, que la negociación era para fortalecerse militarmente y que su fortalecimiento se hacía a partir de sujetar la población a sus estructuras y de financiarse con la economía ilícita y con el gran capital ilícito”, escribió el jefe de Estado en su cuenta de X.
“El grupo armado ha atacado a la población civil, a las autoridades civiles y a los integrantes de la Fuerza Pública, lo que evidencia poca voluntad de paz”, denunció.
El acto administrativo llega luego de un ataque armado del que fue víctima el pueblo indígena Nasa en Toribío, Cauca (oeste). Las Naciones Unidas rechazaron el atentado, resaltando que el territorio está bajo vigilancia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
En el decreto, firmado por el presidente y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, se advierte que “el Estado Mayor Central de las FARC-EP presente en los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca ha incumplido los presupuestos fundamentales del CFBTNT pactado atacando a la población civil, a las autoridades civiles y a los integrantes de la Fuerza Pública, y evidenciando poca voluntad de paz”.
Además que se han registrado “ataques de las estructuras del Estado Mayor Central de las FARC-EP a la población civil, incluyendo a organizaciones y líderes sociales que se han resistido a sus acciones violentas en los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca, han generado una situación de amenaza y vulneración de derechos y libertades que exige la intervención de la Fuerza Pública y de las instituciones del Estado en su conjunto”.
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Antes del hecho, el gobierno de Gustavo Petro había acordado que el cese al fuego bilateral iba hasta el 15 de julio de este año, luego de la prórroga de una primera tregua, que llegaba hasta el final del 15 de enero.
El Estado Mayor Central es una facción disidente de la extinta guerrilla de las FARC (desmovilizada en 2016 tras la firma de un acuerdo de paz con el Estado colombiano) y surgió cuando mandos importantes se apartaron de los acuerdos firmados.
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Con información de Sputnik.