El Gobierno de Argentina anunció el envío de las cuatro fuerzas federales con apoyo militar a la ciudad santafesina de Rosario (centro), asediada por la violencia y el narcotráfico, y la creación de un comité de crisis por pedido del gobernador de esa jurisdicción, Maximiliano Pullaro.
“El presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, han conformado un comité de crisis con el objetivo de intervenir en la ciudad de Rosario con las Fuerzas de Seguridad federales, tras un pedido del Gobernador”, informó el domingo la Oficina del Presidente en un comunicado.
Rosario, una urbe portuaria que es la tercera más poblada del país, sufre una ola de violencia asociada a bandas de narcotraficantes que en la última semana recurrieron a sicarios para asesinar a dos taxistas, un conductor de autobús y un empleado de un estacionamiento, este último hace unas horas.
La Policía Federal, la Gendarmería, la Prefectura Naval, la Policía de Seguridad Aeroportuaria asistirán en el combate contra el narcotráfico junto con las Fuerzas Armadas, que fueron facultadas para realizar operaciones de seguridad interior, sin que el Ejecutivo especificara las tareas que realizarán.
El Ejecutivo aseguró que enfrentará “a la mafia del narcotráfico y a los sicarios que instauraron un régimen de muerte y terror en la ciudad de Rosario”.
La coalición gobernante, La Libertad Avanza (ultraderecha), también afirmó que «no se dará ni un paso atrás» y que los rosarinos recuperarán «las calles y la libertad».
El domingo fue baleado un centro penitenciario ubicado al oeste de la ciudad, la Oficina de Recepción de Detenidos, cuando el jueves también fue atacada una comisaría al sur de la ciudad.
Los episodios de violencia siguen a la publicación que realizó el gobernador Pullaro en las redes de fotos de reclusos durante una requisa en una cárcel donde se alojan sicarios y narcotraficantes de segunda línea.
Las imágenes mostraban a los detenidos rodeados de militares y sentados con el torso desnudo, con las manos maniatadas con precintos sobre la espalda, y con la cabeza hacia abajo, al estilo que caracteriza los métodos utilizados en El Salvador por su presidente, Nayib Bukele.
“Cada vez la van a pasar peor”, había advertido el martes el mandatario provincial.
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Narcoterroristas
El presidente de Argentina, Javier Milei, lamentó los cuatro homicidios que tuvo lugar en la última semana y tras asociar la delincuencia con el kirchnerismo y el socialismo, aseguró que debían enfrentar “a un grupo de narcoterroristas desesperados por sostener el poder y la impunidad”.
“Mientras sea Presidente, no vamos a dejar de perseguirlos. No vamos a dejar de requisar las cárceles. No vamos a titubear cuando la vida de un inocente esté en juego. No vamos a permitir que sigan gobernando Rosario”, dijo.
El mandatario habilitó a las Fuerzas de Seguridad a “hacer lo que sea necesario para reinstaurar el orden”.
“Vamos a redoblar esfuerzos, encerrarlos, aislarlos, recuperar las calles y la libertad de los rosarinos. No negociamos, porque sabemos que son ellos o nosotros”, sostuvo.
Rosario, donde nació el jugador Lionel Messi, tiene la mayor tasa de homicidios de toda la nación, con 287 asesinatos solo el año pasado, un récord en la historia de la ciudad, según el informe anual del Observatorio de Seguridad Pública de la Provincia de Santa Fe.
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Con información de Sputnik.