El Ejército Nacional avanza de la mano con la comunidad por eso conoce y aporta al bienestar de los vaupenses; tal es el caso que el aeródromo requería de una urgente intervención y soldados llegaron con palas, picas, maquinaria y sobre todo con la mejor disposición para adecuar la pista y así garantizar el aterrizaje de aeronaves de carga y de pasajeros.
En el departamento del Vaupés habitan 27 etnias indígenas que han hecho de la espesa selva su hogar, formando caseríos y comunidades en medio de ella, siendo el aire y el agua sus vías de transporte, destacándose la vía aérea como la más efectiva para la geografía agreste de la zona.
De este modo, las pistas de aterrizaje de la región se convierten en activos estratégicos, puesto que es por ahí que ingresan los alimentos, elementos para atención en salud, entre otros, como es el caso del municipio de Carurú, que cuenta con 3.325 habitantes, según censo del DANE, y confluyen etnias como Guananos, Cubeos, Piratapuyos, Tarianos, Carapanas, Carijonas, Desanos, Curripacos y Tucanos.
Es por ello que soldados del Ejército Nacional, una vez identificaron fallas en la superficie de la pista de aterrizaje, y en apoyo a la Alcaldía de Carurú y sus habitantes, con pica y pala en mano, trabajaron durante 21 horas bajo el inclemente sol que cobija la región, para compactar el terreno y adecuarlo de tal manera que el aterrizajes de las aeronaves sea más seguro.
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Ejército Nacional continuará velando por la seguridad y el bienestar de las comunidades más vulnerables de las regiones apartadas, acompañándolos hombro a hombro con la institucionalidad para llevar beneficios que satisfagan sus necesidades.
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