Se cumplen 20 años de la llegada del helicóptero HUEY II al Ejército Nacional de Colombia. La tenencia de estos helicópteros ha sido definitiva en el desarrollo de operaciones militares que han entregado victorias a Colombia, como Sodoma, Relámpago, Magenta, entre otras, las cuales han trascendido en la historia.
Fue en el año 2001 que dentro de los programas de cooperación entre los Estados Unidos y el Gobierno de la República de Colombia, se estableció la entrega de 25 helicópteros UH-1H II, en calidad de préstamo para que fueran operados por el Ejército Nacional.
La llegada de cinco helicópteros UH-1H II al, en ese entonces, Batallón de Helicópteros, en el año 2002, marcó una pauta importante para el desarrollo de las operaciones militares en Colombia; poco a poco y en menos de un año fueron llegando más helicópteros, completando un total de 24 aeronaves, fortaleciendo así los vuelos de entrenamiento, para lo que se conformó entonces el primer curso de transición al equipo.
Debido al conflicto que el país estaba pasando en la lucha contra el narcotráfico y los grupos armados al margen de la ley, para el año 2005 en el mes de abril llegan los primeros cuatro helicópteros del plan escudo y posteriormente en el mes de junio cuatro helicópteros más.
En un principio, se contó con la formación y asesoría de personal civil de la compañía DYCORP de los Estados Unidos, para implementar y estandarizar la doctrina y procedimientos de vuelo. Debido al éxito y efectividad de la operación de estos helicópteros, llamados “Cazadores”, para el año 2007, y de acuerdo con la disposición 019, se crean y reorganizan las unidades de la Aviación del Ejército Nacional, activándose así el Batallón de Aviación Nº 5.
Desde entonces, una minoría selecta de hombres bajo las premisas de doctrina, disciplina y valor, surcan sigilosos y dominantes los cielos del territorio nacional, brindando apoyo oportuno, con precisión y efectividad a las tropas en tierra y a la población civil.
Han sido 20 años de operación aérea, reflejados en sus más de 106 mil horas de vuelo, superando toda adversidad y desafíos, doblegando la voluntad del enemigo.
Con aproximadamente 20 mil horas de entrenamiento diurnas y 16 mil horas en condición de lentes de visión nocturna, se preparan nuestras tripulaciones para así ejecutar misiones de seguridad, apoyo de fuego, reconocimiento, asalto aéreo, paracaidismo, grúa de rescate, e infinidad de tareas en el cumplimiento de la misión institucional.
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De esta manera, la División de Aviación Asalto Aéreo con su Brigada de Aviación N.°25, y con los poderosos “Cazadores” HUEY II, seguirá llegando a todos los rincones de nuestro país, para entregar más victorias al país y seguir listos para atender las necesidades del pueblo colombiano.
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