El Superintendente de Industria y Comercio, Andrés Barreto González, anunció que trasladará a la Fiscalía General de la Nación los centenares de denuncias que han recibido en los últimos días en contra de la empresa Buena Vibra Eventos E.U., la cual aplazó el Jamming Festival 2022 a 24 horas de su inicio en Ibagué.
Barreto González también recalcó que prohibió la promoción y venta del Jamming Festival 2023 hasta tanto no de una respuesta y solución efectiva por los hechos acontecidos con el evento ofertado, anunciado y vendido para este año (2022).
Así mismo, el funcionario destacó que se están verificando que tipo de consecuencias jurídicas pueden afectar a la empresa que anunció la cancelación del evento masivo con solo un (1) día de preaviso, para determinar si esto vulnera los presupuestos legales de protección al consumidor.
La cancelación de este evento, que habría vendió unas 140 mil boletas, cuyos precios oscilaban entre los 300 mil y 700 mil pesos, produjo millonarias pérdidas no solo a las personas que habían adquirido el tiquete, sino en el comercio de la ciudad de Ibagué, en donde la capacidad hotelera había sido totalmente copada, cientos de comerciantes habían arrendado locales para abastecer a los asistentes, varios de los cuales incluso sacaron créditos para participar en el evento, y ahora incluso perdieron la mercancía puesto sus puestos de comida fueron saqueados una vez se supo que el festival había sido suspendido.
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Así mismo, en la ciudad de Bogotá, personas inconformes con la decisión vandalizaron el bar Casa Babylon, en donde se vendían las boletas para el evento, por lo que tuvo que intervenir el ESMAD de la Policía de Bogotá para evitar mayores consecuencias en contra de la propiedad.
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