Se espera que tras la realización de este evento, la inversión en fintech en la región siga creciendo en los próximos años y que para el año 2025 alcance los 150.000 millones de dólares.

La ampliación del portafolio de servicios de cada entidad, sin importar su objetivo, permite ampliar los negocios y atraer más personas con necesidades diferentes. Por otro lado, la caída de costos se vería reflejada en la posibilidad de mejorar las ventas al ofrecer la solución acertada en el momento justo.