La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) necesita 160 millones de dólares para reducir el impacto del fenómeno natural El Niño en los medios de vida agrícolas y la seguridad alimentaria de las poblaciones más vulnerables, según su Plan de Respuesta y Acción Anticipatoria actualizado.
“Según el Plan, la FAO necesita urgentemente casi 160 millones de dólares para prestar apoyo a más de 4,8 millones de personas hasta marzo de 2024”, indica el comunicado.
En particular, el Plan prioriza acciones en 34 países de África Oriental y Meridional, Asia y el Pacífico, América Latina y el Caribe.
En África Oriental, El Niño se asocia con lluvias superiores a la media, que provocan inundaciones y deslizamientos de tierra, especialmente en la parte oriental de Etiopía, Kenia, Somalia y en el sur de Uganda.
En África Meridional y en varias partes de América del Sur y Central, el fenómeno suele producir menos precipitaciones, afectando la producción agrícola y la seguridad alimentaria.
Al mismo tiempo, en la región de Asia-Pacífico, El Niño puede traer demasiada o muy poca lluvia, dependiendo de la ubicación.
La nota subraya que el mundo se enfrenta al actual episodio del fenómeno “con un récord de 258 millones de personas que padecieron hambre aguda en 2022 y solo un 20 por ciento de los fondos necesarios para hacer frente a los altos niveles de inseguridad alimentaria”.
Los agricultores, los pastores, los pescadores y otros pequeños productores, continúa, son los que sufren los efectos más directos e inmediatos de las crisis climáticas.
“Por lo tanto, se deben adoptar medidas preventivas eficaces para evitar daños y pérdidas en los cultivos, el ganado, las tierras productivas, los recursos hídricos y la infraestructura a fin de proteger los alimentos en su origen”, señala.
Los estudios de la FAO muestran que cada dólar invertido en acciones de anticipación puede generar un retorno para las familias agrícolas de más de 7 dólares en pérdidas evitadas y beneficios adicionales.
El Plan actualizado de la organización se centra tanto en la prevención del impacto de El Niño, como en las primeras respuestas en la situación cuando resulta imposible evitar la devastación por el fenómeno natural.
“Algunas de las actividades más urgentes de este Plan requieren la financiación lo antes posible, en particular para que las variedades de semillas adecuadas lleguen a los agricultores para asegurar una cosecha a pesar de las probabilidades de sequía o inundaciones”, recalca.
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Para el pasado 30 de octubre, la FAO movilizó 35 millones de dólares, lo que dejó un déficit de 125 millones, añade el comunicado.
Sin embargo, según el organismo, comenzaron las acciones preventivas en 19 países priorizados gracias a la financiación flexible de los socios de recursos como Alemania, Bélgica, Canadá, Noruega, el Reino Unido, Suecia y la Unión Europea.
El fenómeno de El Niño se produce cuando la temperatura superficial del océano supera el promedio por medio grado centígrado, dirigiendo el flujo del calor del océano a la atmósfera.
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Con información de Sputnik.