El presidente de la República, Iván Duque, felicitó en la base de operaciones a los comandos especiales de Policía y Fuerzas Militares que participaron en la operación que concluyó con la captura de Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’, principal capo del Clan del Golfo, la principal estructura de narcotrático y minería ilegal de país.
Las autoridades aseguraron que por la captura de alias ‘Otoniel’ se pagará la recompensa de 3 mil millones de pesos que se estaba ofreciendo y en estos momentos se está trabajando en agilizar su proceso de extradición hacia los Estados Unidos.
Así mismo, el jefe de Estado aseguró que ahora las operaciones militares se concentrarán y la ubicación y neutralización de Jobanis de Jesús Ávila (Chiquito Malo), cabecilla de la subestructura Central del Clan del Golfo y quien hasta este fin de semana estaba encargado de coordinar la seguridad de alias Otoniel.
Sin embargo, en la organización criminal también tiene un gran poder Wilmer Antonio Quiroz, alias ‘Siopas’, capo de la subestructura Suroeste, y por quien se da una recompensa de 530 millones de pesos por su captura, el mismo valor que se ofrece por ‘Chiquito Malo’.
Palabras del presidente de la República:
“Gracias por lo que han hecho por Colombia, gracias por su entrega a esta patria. Este es el triunfo de todos, aquí no hay triunfos individuales. Mis compañeros de gobierno: Ministro Molano, mi gratitud; doctor Víctor Muñoz, director del DAPRE; Ministro Palacios; Ministro Wilson Ruíz. Toda esta es la institucionalidad junta, que hoy viene también a rendirles tributo a ustedes.
Lo que aquí se ha logrado marcará un precedente para siempre en las operaciones en nuestro país, porque la operación Osiris será recordada como la más importante operación contra el narcotráfico en este siglo en nuestro país. La operación Osiris, hoy, ha sido reconocida en todos los diarios del mundo, ha sido reconocida por todos aquellos que han sufrido la violencia de “Otoniel”.
Hoy Colombia se hace grande y vamos por más. Ya el Clan del Golfo tiene sentenciado su final y por eso a “Chiquito Malo” y a “Siopas”, el otro bandido alcahueta de Otoniel, también el mensaje que se les envía es clarito: ¡O se entregan o vamos por ustedes!
Ustedes lograron algo prácticamente preciso al 100%: el trabajo por cuadrículas territoriales, el cerrar y cercar a este bandido, hacerle una cacería. La forma en la que actuó toda la inteligencia -se compartió la información, se trabajó para llegar a él- marcará para siempre el precedente de que en este país no hay bandido alguno que se pueda esconder del Estado colombiano.
A sus familias, queridos amigos, queridos policías y soldados, mi afecto también. Sus padres, sus madres, sus hermanos, sus hermanas, sus esposas, sus hijos muchas veces tienen que enfrentar ausencias de ustedes, porque ustedes tomaron el camino de darlo todo por Colombia. Hoy Colombia les da a ustedes un reconocimiento para seguirlos motivando.
Encarnan ustedes los valores y los principios en nuestras instituciones y una Policía de 130 años, un Ejército de más de 200 años y, como su comandante supremo, solo puedo decirles que cuentan conmigo. Así como ustedes están dispuestos siempre a dar la vida por Colombia, yo estoy dispuesto a dar la vida por ustedes.
Me siento realmente orgulloso de ser su comandante supremo. Los amigos de la prensa que nos acompañan, yo quiero ahora mi General Vargas, General Navarro, que puedan nuestros comandantes que estuvieron en esta operación, compartir algunos detalles de cómo se hizo este cerco.
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Estar aquí en Necoclí, en esta tierra que fue por muchos años amenazada por “Otoniel”, es también para decirle a Colombia que nosotros llegamos a donde tengamos que llegar. Que a nosotros no nos pone el ritmo la delincuencia. Nosotros la vamos a seguir combatiendo como lo hemos hecho en este Gobierno.
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Yo le prometí a Colombia que caería este bandido, lo volví un compromiso personal. Lo saben los generales. No había un solo día en que no estuviéramos trabajando por la configuración de esta operación exitosa.
Esta mañana recibí un mensaje del General Atehortúa, General Vargas, felicitándolo a usted y felicitando todo este trabajo, y recordaba las horas de trasnocho buscando cómo llegar aquí.
El General Barrera, lo sabe también, todo lo que luchamos. Lo sabe el General Navarro a profundidad, lo sabe Zapateiro, Isaac lo sabe muy bien. Esto ha sido un trabajo de años y, a veces, la fortuna no nos llegaba al objetivo. Pero los tiempos de Dios hay que saberlos entender, son perfectos.
Siempre aprovecho para darle gracias a Dios todo poderoso y a la patrona de Colombia, nuestra Virgen de Chiquinquirá, porque sus tiempos nos llevaron a ese objetivo, gracias al heroísmo de ustedes.
A mis soldados, con afecto ¡ahhhh juaaa! A mis policías ¡Dios y patria! A toda la fuerza pública ¡Viva Colombia! ¡Adelante, vamos por la victoria!”