La Flora Bacteriana Intestinal está compuesta de millones de bacterias sanas que habitan a lo largo de todo el tracto gastrointestinal, permitiendo la disolución y absorción adecuada de los alimentos. Al consumir antibióticos sin prescripción médica, estos matan e interrumpen la multiplicación de las bacterias intestinales, provocando una mala salud intestinal. ¿Cómo prevenirlo? Luis Guillermo Jiménez, médico y epidemiólogo del laboratorio de Suplementos Probióticos y Alimentos Funcionales, Bionutrec, puntualiza algunas recomendaciones.
Cada vez que decidimos ir directamente a la farmacia a comprar un antibiótico para tratar una enfermedad, en lugar de buscar un profesional para tratar dicho padecimiento, estamos auto medicándonos irresponsablemente y, además, estamos promoviendo una crisis mundial de salud. Contrario a lo que se cree comúnmente, los antibióticos no son medicamentos de venta libre, y los únicos autorizados en formular, según la legislación colombiana, son los médicos, veterinarios y odontólogos.
Los antibióticos son medicamentos específicos para matar bacterias y estas vienen en muchas variedades. Algunos antibióticos están diseñados para actuar sobre una bacteria específica. El Dr. Jiménez explica que existe una clasificación de bacterias que se da por cargas, algunas son gram positivas y otras son gram negativas, por lo que, si a una persona se le da un orden médica con antibióticos para una bacteria gran negativa, esta no funcionará para otra persona con otro tipo de bacteria, así tenga los mismos síntomas.
Además, está provocando en su organismo algo que se conoce como resistencia bacteriana transmisible. Es decir, “las bacterias que no son lesionadas, aprenden a conocer el antibiótico y empiezan a formar resistencia contra ese medicamento”, afirma el Dr. Jiménez. En el futuro entonces, si esa persona vuelve a ser infectada por esa misma bacteria, no le van a funcionar los antibióticos, arriesgando su salud y la de otros “porque son bacterias que, de ahí en adelante, van a tener una división celular con un gen, que va a encontrar una forma de luchar contra los antibióticos” concluye.
Independientemente del antibiótico que se consuma, este tendrá efectos adversos en la flora intestinal, pues ataca a las bacterias sanas que habitan en el intestino. Cuando se consumen probióticos, es decir una gran cantidad de bacterias vivas sanas, exactamente iguales a las intestinales, el organismo recupera la flora bacteriana ubicando estas nuevas bacterias en los espacios donde la flora se lesionó previamente.
El laboratorio colombiano Bionutrec, es pionera en el desarrollo, producción y mercadeo de suplementos probióticos y alimentos funcionales. Esta se especializa en detectar cuáles son las mejores cepas bacterianas, las de mejor reproducción intestinal y así proveer esas bacterianas sanas para recuperar la salud intestinal. El Dr. Jiménez afirma que es recomendable consumir de forma simultánea un antibiótico (siempre que este sea previamente formulado) y un probiótico, pues “ese probiótico se ubicará en el intestino y las bacterias sanas que alcancen a morir con el antibiótico, pueden ser recuperadas con el probiótico que se está consumiendo”.
A diferencia de otros probióticos que se consiguen normalmente, los de Bionutrec están envueltos en una capa que los protege, tanto del jugo gástrico, como de la temperatura. En general, los probióticos deben ser refrigerados, pero con estos no es necesario. La ventaja de su presentación les permite continuar vivos sin necesidad de refrigeración, pues se conserva intacta la salud del probiótico. Además, los productos de Bionutrec contienen prebióticos, que vienen dentro de los sobres de los probióticos y se convierten en el alimento de las células probióticas, que les permite estar vivas y en condiciones sanas, mientras están en el sobre.
El Dr. Jiménez recomienda consumir un sobre de Prolardii, de Bionutrec, a diario y de forma simultánea con el consumo de antibióticos, lo que permitirá mantener una buena salud intestinal y evitar los efectos adversos de los antibióticos en la flora bacteriana.
Con información de webershandwick