Según los resultados de una nueva encuesta mundial de Accenture, la llegada de la pandemia por el COVID-19 ha llevado a la innovación de los negocios y empresas a reinventar sus productos y servicios.
Y es que pasado un año de cuarentenas, el 95% de los encuestados afirmó haber realizado al menos un cambio en su estilo de vida que se quedará de forma permanente. Más de 9.650 personas hicieron parte de la última encuesta realizada en 19 países cuyos resultados muestran que la mayoría de los cambios de comportamiento se tornarían permanentes o a un no corto plazo.
El trabajo en casa, el teletrabajo, los cambios en los patrones de viaje y el deseo de comprar localmente hacen parte del desafío de las industrias para mirar cómo atender al nuevo consumidor.
Emilia Restrepo, Digital Transformation Business Advisor de Accenture Colombia expresó “Los efectos de la pandemia se dejarán sentir durante algún tiempo y son un poderoso llamado para que las empresas orientadas al consumidor sean ágiles, resilientes y receptivas al cambio”, y agregó “La pandemia del COVID-19 ha desencadenado una nueva ola de innovación. A medida que las organizaciones se replantean formas de hacer negocios que generen crecimiento, muchas están utilizando capacidades analíticas avanzadas para detectar, responder y orientar las tendencias de consumo cambiantes”.
Es así que varias compañías dirigidas al consumidor han optado por organizar sus negocios en la nube, afrontado los costos y han seguido reforzando la resiliencia y la seguridad, con la infraestructura necesaria para tal fin y óptimos resultados.
La pandemia obligó también a un rápido cambio en el trabajo desde casa, y muchos de los encuestados expresaron que quieren flexibilidad en cómo y dónde trabajar en el futuro. Más de tres cuartas partes (79%) de los encuestados dijo que le gustaría trabajar ocasionalmente desde un “tercer espacio” -un lugar diferente a su casa o lugar de trabajo- y más de la mitad que estaría dispuesto a pagar hasta 100 dólares al mes para trabajar desde un retailer, una cafetería, un bar, o un hotel. Quedando abierta de esta manera una oportunidad potencial para que los sectores de la hostelería y el comercio aumenten sus ingresos.
Por otra parte, en referencia a los viajes, la mitad (46%) de los encuestados afirma no tener planes en ese sentido después de la pandemia, o tiene la intención de reducirlos a la mitad. Las perspectivas actuales indican que la vuelta a los viajes se reanudará principalmente en el mercado del ocio, lo que empujará al sector a adaptarse y ser aún más eficiente para compensar los ingresos perdidos.
En referencia, Emilia Restrepo dijo “Algunos hoteles convirtieron las habitaciones en restaurantes pop-up, mientras que otros experimentaron con la oferta de espacios de oficina temporales para los clientes que buscaban un “tercer espacio” para trabajar. Si bien se ha experimentado con la innovación en determinados focos, las empresas deben ampliar estos nuevos servicios y abordar el renovado interés de los viajeros por la salud y la seguridad, por ejemplo, utilizando la nube para impulsar interacciones totalmente sin contacto.”
Nuevos hábitos de consumo permanecerán
Entre los encuestados la mayoría también piensa que sus hábitos de compra han evolucionado a largo plazo. De acuerdo con el informe de Accenture, es probable que el espectacular aumento del comercio electrónico se mantenga o se acelere aún más.
Por ejemplo, la proporción de compras en línea de productos como la alimentación, la decoración del hogar, la moda y los artículos de lujo por parte de los usuarios poco frecuentes del comercio electrónico ha aumentado un 343% desde el brote.
La ejecutiva concluyó que “los principales retailers se adaptaron rápidamente al aumento del comercio electrónico y están utilizando la tecnología para servir a los clientes de nuevas maneras. Muchos adoptaron tecnologías disruptivas, como la realidad aumentada, para recrear la experiencia de la tienda física y ayudar a los consumidores a visualizar mejor los productos, mientras que otros reutilizaron tiendas cerradas para convertirlas en centros de cumplimiento locales con tecnología de recogida y embalaje. Incluso en un mundo post-pandémico, las empresas tendrán que satisfacer el apetito de los consumidores por las compras en línea con una entrega rápida e invertir con un sentido de propósito en su gente, cadenas de suministro, tiendas físicas y canales digitales para estar bien posicionados para impulsar el crecimiento.”