La ola invernal que azota al departamento del Putumayo propició que la Policía Nacional desplegara uno de sus helicópteros Black Hawk para reforzar las labores de asistencia que brindan las autoridades nacionales y locales con motivo del fuerte invierno que azota al sur del país, y fue así como se efectuó un rescate muy cerca a los ríos putumayo y Guineo.
En la zona las fuertes lluvias durante los últimos meses a causado el desbordamiento del cauce de los ríos en esta región, arrastrando consigo miles de hectáreas de cultivos lícitos, ganado y aves de corral.
En esta oportunidad, la furia de las aguas tocó a doña Graciela y su esposo don Alexander, dos campesinos que habitan muy cerca a la rivera del rio Putumayo en donde tienen unos cultivos de yuca, cacao y pancoger, además tenían unos cerdos y algunas gallinas ponedoras, su casa la habían construido con mucho esfuerzo con la ayuda de unos vecinos de la vereda Albania, el recrudecimiento del invierno aumentó el nivel de los ríos ocasionando el desbordamiento y las inundaciones en la zona, el domingo en la noche las aguas se llevaron su casa, ellos corrieron hasta llegar a una parte segura para salvar sus vidas, toda la noche la pasaron a la intemperie resguardados bajo unas hojas de palma, el lunes cuando la luz del día les permitió observar en donde se encontraban, pudieron darse cuenta que de su vivienda solo quedaban los techos, habían perdido todo.
Doña Graciela se aferró a la oración para pedir a Dios por ayuda, no tenían ninguna forma para comunicarse con persona alguna que los pudiera ayudar, como unos náufragos estuvieron resguardados bajo una palmera, desde allí veían como flotaban techos y partes de otras casas que el ríos había arrastrado, el miedo se apoderó y las esperanzas parecían perderse a cada momento, el día estuvo lluvioso, en la tarde los uniformados que adelantan el programa de erradicación de cultivos ilícitos de coca estaban listos en una coordenada adecuada como un helipuerto para que los helicópteros de la Policía iniciaran la extracción luego de culminar sus labores, ya de camino a la base de Villa Garzón en Putumayo, los técnicos apuraban el paso advirtiendo del problema de volar bajo la lluvia, los radares meteorológicos de las aeronaves avisaban de una tormenta en la región por lo que era importante llegar pronto a la Base o de lo contrario había que buscar una parte segura en donde descender, esta opción no es tenida en cuenta por la dificultad en la región en donde hacen presencia grupos armados ilegales que atacan constantemente a la fuerza pública.
“Como un milagro”, así lo describe la señora Graciela, allí en el aire se escuchó el motor del helicóptero, la lluvia arreciaba, ellos usando señales movían los brazos para que los pilotos los observaran, por fortuna los técnicos alcanzaron a ver a la pareja, una maniobra de rescate se inició en donde el jefe de la misión ordenó una extracción inmediata, había entonces que dejar a los uniformados y sus equipos en un claro para que esperaran mientras se hacia el rescate.
El piloto del Black Hawk hizo un descenso buscando un lugar cerca a los náufragos en donde pudiera aterrizar la aeronave sin que esta se quedara enterrada en el lodo, la señora Graciela fue la primera que con la ayuda de los técnicos abordó la aeronave, don Alexander en unas condiciones precarias sin camiseta y tan solo con una pantaloneta fue subido, en el aire los pilotos les entregaron sus chaquetas para que se abrigaran, el frio por el tiempo que habían durado expuestos y la falta de comida había debilitado sus salud.
Después de llevarlos a un centro de salud en la ciudad de Villa Garzón, las aeronaves regresaron rápidamente para recoger a los uniformados que habían dejado para retornarlos a la Base, el medico que atendió a las personas rescatadas confirmó un buen estado de salud, tan solo presentaban una descompensación por deshidratación y falta de alimento.
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“Hemos dispuesto de vuelos permanentes en la zona, aún en la noche y con la ayuda de visores nocturnos para encontrar si existieran damnificados o afectados por esta ola invernal en la región” aseguró el Mayor General Ricardo Augusto Alarcón Campos director Policía Antinarcóticos.
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