Lorena Mesa, subdirectora general de la Unidad para las Víctimas, durante su intervención en la cumbre de gobernadores en Puerto Gaitán anunció que la Ley 1448 de 2011 y los decretos Ley Étnicos fueron avalados por el presidente Iván Duque para que en los próximos 10 años se les pueda cumplir a las víctimas el conflicto armado.
Con el respaldo que el Gobierno Nacional le ha brindado a la Unidad para las Víctimas, la entidad ha logrado cumplirle a las personas afectadas por el conflicto armado en materia de indemnizaciones, reparación colectiva, atención psicosocial, prevención y atención de emergencias y atención humanitaria inmediata, entre otros procesos misionales.
En su balance ante los mandatarios, la subdirectora destacó que la Unidad tiene cifras importantes para mostrar como el de indemnizaciones entregadas a más del 17 % de las víctimas, que son alrededor de 204.460, por un valor cerca a los 1.8 billones de pesos; además de la implementación de aproximadamente 1.053 acciones reparadoras para 159 sujetos de reparación colectiva con una inversión de 115.579 millones de pesos, que dan muestra del esfuerzo y el avance que se ha efectuado durante este gobierno.
Lorena Mesa también resaltó que en temas de prevención, la Unidad ha coordinado acciones para la atención de 177 eventos de desplazamiento forzado en el país y que en infraestructura, con el apoyo del presidente Iván Duque, se han destinado 26.520 millones de pesos para el desarrollo de 198 proyectos de infraestructura social y comunitaria en 168 municipios del país.
En el mismo evento, la subdirectora general entregó certificación territorial a los gobernadores con calificación ejemplar en el cumplimiento de la Política Pública de Víctimas de la Ley 1448 de 2011, y destacó que con el trabajo mancomunado entre nación-territorio se podrá seguir avanzando en la reparación integral a las víctimas.
Los gobernadores de Antioquia, Arauca, Atlántico, Cesar, Huila, Magdalena, Norte de Santander, Putumayo, Santander y Vichada recibieron la certificación territorial por su compromiso con la atención a las víctimas.
De otro lado, la Unidad tuvo un espacio para dar a conocer una de las herramientas con las que le apuesta al fortalecimiento de las regiones a través del apoyo a los proyectos productivos, con los que las víctimas del conflicto armado han iniciado emprendimientos.
Por ello, Andrea Romero, víctima de desplazamiento forzado, fue la cara visible del arduo trabajo que personas que como ella les ha tocado vivir de cerca, pero hoy le apuestan a la paz por medio de sus emprendimiento como el de Inchick, que transforma la semilla de sacha inchi en derivados como aceites, cremas corporales, maní, entre otros, y con lo cual, como ella lo manifiesta, “impulsamos el tejido social, ambiental; luchamos por la defensa de las mujeres que son emprendedoras y estamos en la lucha de una construcción de paz”.