Enfrentar un diagnóstico de cáncer es un desafío físico y emocional. Pero hacerlo acompañada, con un enfoque integral que prioriza también la salud mental, puede marcar la diferencia. Radioterapia Oncología Marly, institución con más de 35 años de experiencia en tratamientos oncológicos, ha desarrollado un modelo pionero de atención que integra la psicooncología como un pilar fundamental en su tratamiento para mujeres con cáncer.
Este enfoque se potencia con un símbolo poderoso: el único acelerador lineal del país diseñado en color rosa, icónico emblema de la lucha contra el cáncer femenino. Más allá de su apariencia, este equipo representa el compromiso tangible de la institución con una atención sensible, empática y especializada.
Aunque la institución atiende a hombres y mujeres por igual, su enfoque ha estado fuertemente dirigido a comprender y atender las necesidades específicas de las pacientes mujeres, desde el momento del diagnóstico hasta la remisión o el cuidado paliativo.
Psicooncología: una herramienta clave en el tratamiento
La psicooncología es una rama de la psicología dedicada a acompañar emocionalmente a las personas diagnosticadas con cáncer y a sus familias, brindándoles las herramientas necesarias para enfrentar el proceso de manera integral.
La Dra. Sara Albornoz, directora de Psicooncología en Radioterapia Oncología Marly, lidera un equipo que ha diseñado una ruta de atención estructurada para apoyar emocionalmente a las pacientes. “Desde la primera cita, realizamos ejercicios de respiración, guiamos al paciente hasta el acelerador lineal y comenzamos un proceso terapéutico que les permite afrontar el tratamiento con claridad, tranquilidad y fortaleza emocional”, explica Albornoz.
El acompañamiento se extiende a los cuidadores, quienes también reciben orientación y contención emocional. Preguntas frecuentes como ¿con qué frecuencia recibiré radioterapia?, ¿cómo debo cuidarme durante la terapia?, ¿qué debe saber mi cuidador sobre mi proceso? se abordan con empatía, información clara y apoyo continuo.
Un modelo que transforma vidas
Este enfoque ha demostrado tener un impacto positivo no solo en la adherencia al tratamiento, sino en la calidad de vida de las pacientes. En cada fase de la enfermedad —diagnóstico, tratamiento activo, remisión o paliativos— el equipo de psicooncología está presente, promoviendo espacios seguros de contención y apoyo.
Una de las estrategias más valiosas es la conformación de grupos de apoyo con pacientes sobrevivientes, quienes comparten sus experiencias y se convierten en guías y referentes para quienes inician su tratamiento.
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“Como profesional, madre y mujer, me siento profundamente orgullosa de este trabajo. Nuestra misión no es solo tratar el cáncer, sino también construir calidad de vida para estas valientes luchadoras”, concluye la Dra. Albornoz.
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