La Policía Nacional a través de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN), en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, la Agencia Antidrogas ‘DEA’, el Ejército Nacional y la Armada de Colombia, en zona rural del municipio de Mosquera ‘Nariño’, asentamos contundente golpe a las finanzas del Grupo Armado Organizado Residual ‘Alfonso Cano’, estructura ilegal que venía procesando una cantidad aproximada de cuatro toneladas de estupefaciente al mes.
En el desarrollo de un proceso investigativo y en el marco de la operación policial coordinada fueron destruidos tres centros de acopio clandestinos para el procesamiento de cocaína de gran envergadura, junto con 923 kilos de cocaína, 129 kilos de base de coca, un semisumergible, una lancha go fast con dos motores 200, entre otros insumos para el procesamiento del alcaloide.
La modalidad criminal empleada por los narcotraficantes va orientada principalmente a ubicarse estratégicamente en la costa pacífica para cultivar, procesar, transportar y traficar el estupefaciente, situación por la cual aprovechan la posición geográfica de los municipios de los departamentos de Nariño, Cauca y Valle para asentar estructuras artesanales que funcionan como laboratorios clandestinos para el procesamiento de cocaína, que sitúan sobre riveras de ríos y esteros que facilitan el transporte del alcaloide de manera fluvial, para luego embarcarlo en lanchas go fast o semisumergibles a mar abierto hasta centro américa con destino final Estados Unidos.
En este sector del litoral pacífico nariñense confluyen diferentes factores delincuenciales que has desencadenado confrontaciones entre diferentes estructuras armadas por el control del territorio y el manejo ilegal de las rentas criminales producto del narcotráfico, entre ellas los Grupos Armados Organizados Residuales ‘Alfonso Cano’ y ‘Franco Benavides’, ocasionado el desplazamiento de la población campesina y comunidades indígenas de sus territorios hasta las cabeceras municipales.