En el marco de la campaña militar y policial Esparta, tropas del Ejército Nacional, en una operación conjunta con la Fuerza Aérea, coordinada con la Policía Nacional e interinstitucional con la Fiscalía General de la Nación, se golpeó una estructura del Grupo Armado Organizado (GAO) ‘Los Pelusos’, en la vereda Pan de Azúcar, en El Zulia, Norte de Santander.
La operación hace parte de la ofensiva que mantiene la fuerza pública contra esta estructura, en la que se ha logrado neutralizar y contrarrestar de manera contundente el accionar y la amenaza terrorista de los GAO.
En medio de la acción militar, tras sostener un combate con ‘Los Pelusos’, dejó como resultado a dos hombres muertos y a tres capturados, de los cuales dos resultaron heridos y recibieron atención médica por parte de los enfermeros de combate de la unidad militar, garantizando la protección de los derechos humanos y cumpliendo las disposiciones del Derecho Internacional Humanitario.
Entre los detenidos hay una mujer de origen extranjero, además, se incautó abundante material de guerra.
Los capturados son señalados de estar dedicados a la extorsión, secuestro y narcotráfico, y serían quienes vendrían intimidando a la comunidad con el cobro de dineros para llevar a cabo las acciones delictivas con las que pretendían fortalecer el brazo armado de esta estructura que está debilitada logística y financieramente por las contundentes operaciones de la fuerza pública.
Esta estructura de ‘Los Pelusos’ intentaba reorganizarse y volver a las áreas que ya fueron recuperadas por el Ejército y la Policía Nacional.
El material de guerra incautado corresponde a cinco fusiles, una pistola, cerca de 1.300 cartuchos de diferentes calibres y 26 proveedores.
En el registro, las tropas incautaron también material de intendencia, comunicaciones, un computador y una memoria.
Los aprehendidos y el material incautado fue dejado a disposición de la autoridad competente, para continuar con el proceso de judicialización.
Esta operación golpea al GAO – ‘Los Pelusos’, devuelve la tranquilidad a la comunidad víctima de las amenazas y contribuye a la protección del Estado y sus recursos.