Inundaciones y otros desastres causados por las últimas lluvias en Bolivia han dejado hasta ahora ocho muertos y 30.943 familias afectadas, de las cuales más de la quinta parte ha sufrido grandes pérdidas, informó este martes el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
“Lamentablemente este año estamos sintiendo muy fuerte el impacto no solo del cambio climático sino del fenómeno de La Niña, por lo cual Bolivia está recibiendo el mayor impacto”, dijo la autoridad a la radio estatal Patria Nueva.
El jefe de Defensa Civil señaló que de las más de 30.000 afectadas, hasta el lunes se contaban 6.394 familias damnificadas por la pérdida de cultivos, viviendas y otras propiedades, que recibían asistencia gubernamental de alimentos y viviendas provisionales.
Los desastres afectaron hasta el lunes a 57 municipios en siete de los nueve departamentos, en los que, además de ocho fallecimientos y la desparición de una persona, se registró la destrucción de 1.478 viviendas y 16.615 hectáreas de producción agrícola, dijo.
Calvimontes apuntó que Defensa Civil se mantenía en alerta máxima porque el Servicio Nacional de Meteorología ha pronosticado fuertes lluvias en los próximos días.
“Todavía se vienen lluvias muy intensas que pueden provocar desbordes de ríos, especialmente en el norte del departamento de Santa Cruz (este) y en el Parque indígena Tipnis”, que son ya los más afectados, dijo.
El viceministro de Defensa Civil añadió que el presidente Luis Arce ha instruido una movilización conjunta de emergencia de la policía y las fuerzas armadas para reforzar las tareas de socorro ante los desastres.
La temporada de lluvias en Bolivia, que se extiende regularmente de noviembre a marzo, suele alcanzar sus máximos de precipitaciones entre enero y febrero.
Con información de Sputnik.